Partidos de Leyenda por Dani Lopez

Una nueva entrega de esta sección, que llega con cuentagotas, como nuestros columnistas no quieren ser unos menos que otros, también con una canción que ilustra la columna, ya sabéis el procedimiento, le dais al play y a leer!!

Nuestra primera Vez

Todos nos tenemos que estrenar alguna vez, pero siempre se suele decir que la primera vez suele ser la más patética y la peor, y una vez más la sapiencia popular nos da la razón.
Corría octubre del 2005, un día caluroso en el que un conjunto de querubines de imberbe pelo en pecho y con toda la ilusión por estrenarse en este "nuevo juego" se posicionaron, o algo parecido, con el objeto de debutar de la forma más brillante. Aquellos jovenzuelos no sabían la que se les caía encima. Años después recordarían esta hecho con una sonrisa picarona, y aunque con nostalgia saben que ahora disfrutan y rinden más que en aquellos primeros años que centraban su "técnica" en el pundonor y el vigor de su situación física. De entre los veteranos del equipo, tan solo se echó de menos al bueno de Sergio, que en esos días estaba fraguando en otras luchas. Las ilusiones de estos jovenzuelos por tener un inicio esplendoroso pronto se fueron al Garate, pero años después podemos decir que ese trago se pasó y hoy en día somos más experimentados.
Normalmente para los debuts se suele solicitar, si se tiene la oportunidad, a alguien fraguado en mil batallas para que te vaya guiando y no termines haciéndote la "picha un lío", y precisamente eso es lo que les pasó a la viaje guardia de Glorioso.net, que hizo su debut ante un experimentado equipo llamado Unión Latina, un equipo ducho que supo en todo momento a que juego se estaba jugando y dónde había que meter el qué.

Tras unos minutos de tanteo, pronto se demostró que Glorioso.net tenía profundidad de banquillo y una técnica exquisita, pero que iba a ser difícil que profundizase en este nuevo juego, ya que cometía una y otra vez los mismos errores de principiante. Tras varias claras ocasiones desaprovechadas por falta de conocimiento de la táctica de este juego, empezaron a llegar los fatales contragolpes que mataron el partido. Pronto se vió que era un error intentar meterse hasta la cocina en vez de intentar guardar las distancias y penetrar al rival desde fuera del área, cuan cuchillo penetra la margarina fresca. Años después, sospechamos que alguno de los componentes de glorioso.net sigue sin haber aprendido la lección y sin ser consciente de que para penetrar las mallas contrarias no es necesario meterse con el objeto de entre las piernas dentro de la "puerta rival". Suponemos que siempre les gustó esa canción de Sergio Dalma que decía algo así como "Bailar de lejos no es bailar, es como estar bailando".

Como iba diciendo, tras unos minutos de tanteo comenzaron los cambios, primeros cambios sin sentido, donde todo el mundo jugaba, pero no sabía ni dónde ni con quién. Si nos hubieran dicho que eso era un trenecito del amor con el Pelanas, más de uno seguro que se lo hubiera creído; métete por aquí, vete al centro, joder a la izquierda no tenemos nada, coordinación que es la tercera vez que me cubro a mi mismo, me habéis pillado en fuera de juego…

Finalmente ocurrió lo esperado, los goles empezaron a caer en contra de Glorioso.net, hasta llegar a cinco como cinco soles. Todos sabemos que los comienzos en glorioso.net son difíciles, pero que tras el calentamiento el motor gloriosista tira para arriba (solo ver como se comienza y se terminan las temporadas por los fríos octubres y los calenturientos mayos). Pese a todo, se vio que ese equipo tenía mimbres, y que tan solo necesitaría hacer unas practicas más sobre el campo, para demostrar el verdadero potencial.

Pese al 5-0 endosado por los rivales, siempre discutido por el letrado que escribe estas líneas, que ha sostenido que nunca se debió dar la victoria al contrario ante el aparente exceso de extracomunitarios del rival, se comenzó a vislumbrar el tipo de juego que iba a hacer el glorioso.net, un futbol total basado en las individualidades, y que individualidades tan "adhesivas", desajustes defensivos, y cachondeo entre nosotros, sobre todo esto, que para llorar ya están otros momentos.

De este primer partido debemos recordar a los veteranos "caídos en combate" que disputaron esa primera contienda, Galder "el pulpo llodiano", Yagoba "el bilbainito con tres huevos", Mela-Metrosexual, Lee "fuck all", Faizu "zurda de oro" o recientemente Ima "me cabreo ganando 5-0 porque no bajan". Con cariño para todos se os dedica especialmente esta crónica.
También para recordar el primer fuera de juego de nuestro gran Larroda, , el primer derribo de pecho-nalidad de Dani, la primera gambetina de Hernández&Fernández, el primer partido en que jugó Tomy de jugador sin lesionarse (balonazos en los huevos incluidos), la primera rajada de Aitor, o la primera chupadita de varios de los genios del equipo…

Pero para finalizar, el mayor recuerdo que todos los presentes en ese partido, será aquel primer abucheo hacia aquél fiestero zurdo cuya ficha fue drafteada en diciembre por su peculiar forma de entender el fútbol, pero que dio grandes tardes-noches de gloria, no por su juego, sino por las compañías femeninas que proporcionó a algunos de los Gloriosistas más fiesteros. Tras más de 10 minutos acosando a varios de los compañeros con argumentos como lo "es que soy el mejor por la izquierda" o "necesitáis mi zurda de oro", saltó al terreno de juego para demostrar lo hablado. Tras dos minutos en el campo y varios fallos de coordinación de su cerebro con sus patas llegó el sumun de su vida deportiva cuando intentó, recalco lo de intentó, tirar a puerta y el balón terminó en el corner. Los comentarios poco políticamente correctos se difundieron por el banquillo, y ese primer día puede ser que se comenzara a marcar el futuro de este zurdo bilbaino, pero aficionado de la Real.

Años después hemos cambiado, aunque algunos dicen que no tanto. Ahora ya corremos con sentido por el campo, hacemos juego colectivo sin abusar de las jugadas personales, bajamos todos a defender, no hay desajustes defensivos ni cagadas de vulto, o eso dicen al menos…